Evolución
y Revolución de la técnica de Animación de Imágenes
El
francés Émile Reynaud invento el Praxinoscopio en 1877 revolucionando
el mundo del entretenimiento, introdujo y vendió su invento por
todos los continentes.
Para competir en un mercado que evolucionaba rápidamente Reynaud
comercializó numerosas modificaciones, como, praxinoscopio-juguete,
praxinoscopio miniatura, praxinoscopio teatro, con motor, con resorte,
con resorte eléctrico, de proyección, etc..
A
pesar de los esfuerzos por mantenerlo de actualidad, el Praxinoscopio,
fue desplazado por nuevos avances, como el kinetoscopio de Thomas Edisón
o el cinematógrafo de los hermanos Lumière.
En la actualidad su contemplación nos resulta de gran atracción.
En el ámbito de las imágenes, modifico la técnica
de los instrumentos hasta entonces conocidos. Nos da por reflexión
una imagen muy nítida a través de un tambor central con
espejos, rotatorios.
Si
tienes habilidades de carpintero puedes intentar la elaboración
del Praxinoscopio, has de hacer con madera el tambor, y el prisma central
que soporta 12 espejos, con unas medidas opcionales. Nuestro modelo tiene
35 cm. de diámetro y una altura el conjunto de 65 cm..
Sobre el prisma central de espejos, se coloca un candelabro con vela y
pantalla (con objeto de verlo por la noche, en aquella época no
había luz eléctrica). El prisma central y el tambor son
solidarios y giran a la par.
De
una vieja lámpara de bronce puedes hacer la base, con una barra
roscada central que hace de eje y soporta el conjunto, en este eje por
medio de tuercas y arandelas colocamos el tambor, al que habremos hecho
un taladro central. Ingeniándonos para que roten libremente tambor
y su prisma, manteniéndose quietas las demás partes.
Aunque tanto en el original como en el de “Máquinas
Científicas”
el tambor se mueve con manivela, obtendremos el mismo resultado moviéndolo
con la mano.
Nos queda confeccionar una tira sin fin, con 12 dibujos correlativos que
colocada en el tambor, frente a los espejos, cuando giramos, nos producirá,
al verse reflejada en ellos, la sensación de movimiento.